lunes, 15 de abril de 2013

Luz y Oscuridad


Dia #1 del Entrenamiento

A partir de aquel día  Dante tuvo que dejarse mimar por los cuidados del mismísimo Dalai Lama que no desperdiciaba el tiempo en tratar de sanar las heridas de su paciente. El mismo monje sabia que las verdaderas heridas a sanar no se encontraban en la superficie de su piel sino dentro de su mismo ser. Una tarea que no iba a ser para nada fácil tomando en cuenta que el mismo Dante era medio terco.
- ¿Donde están mis armas?- pregunto el atendido, un día donde la lluvia bañaba  el pequeño monasterio y el olor a humedad comenzaba a expandirse entre las rendijas de caña- Mis pistolas...
El monje lo miro con reprobación pues no estaba en su naturaleza aceptar armas que pudieran causar daño a otra personas aunque secretamente había guardado las pistolas en un cofre.
- Desde que has llegado aquí no me has parado de preguntar sobre tus pistolas- le dijo en tono severo- ¿Es que acaso en el lugar donde provienes es una costumbre darle mas prioridad a esos pedazos de metal  que a sus propio bienestar?
Dante sonrió inocentemente y el Monje vio que a pesar de que su paciente era un hombre aventajado de edad, poseía rasgos propios de un niño. La brisa cargada con pequeñas gotas de agua invadió el recinto y el monje se acerco a la ventana para cerrarla sin embargo Dante se lo impidió.
- Déjelo así, Wong. Me gusta -
El Dalai Lama a sabiendas de que podría pescar un resfriado dejo la ventana abierta. Sin embargo recordó que la lluvia guardaba un poder bastante influyente si una persona estaba expuesta a ella. Con un rápido movimiento le retiro la sabana que cubría su cuerpo y Dante soltó un resoplido de perplejidad.
- Dante, ¿ quisieras acompañarme afuera?-
- ¿Que paso? ¿Hice algo malo?-
- No solo quiero que vengas conmigo bajo la lluvia ¿Aceptas?-
Dante dudo por varios segundos y asintió. El monje abrió la puerta de su habitación y lo guió hasta las afueras del monasterio donde la lluvia, convertida en tormenta, azotaba con furor. El paciente solo llevaba encima unos pantalones blancos y el resto de su cuerpo estaba cubierto de vendas. Su rostro sin afeitar era un  lienzo que retrataba el paso fugaz e impredecible de los años.
- Dante, acompáñame bajo la lluvia- le insto el Monje y el paciente salio al exterior. El frió atroz traspaso su piel, calando sus huesos y entumeciendo su entrañas. Ambos, bajo la lluvia adoptaron la pose Zen de meditacion y dejaron que la lluvia fuera parte de ellos, una compañera mas.
- ¿Cual es tu mayor preocupacion?- pregunto el monje despues de media hora de estar meditando.
- Yo no tengo preocupaciones, yo soy el hijo de un poderoso demonio y una hermosa madre. Al principio tenia miedo de reconocer mi sangre pues sabia que dos razas se encontraban combinadas. Sabia que tarde o temprano mi verdadero ser, mi lado oscuro, mi oscuridad personal surgiria y se apoderaria de mi cuerpo y mente, causando daño a todos. Por eso abrazo mas mi lado humano, esta figura de carne y hueso que busca adaptarse en este mundo tan imprevisible. Pero a decir verdad no se quien soy en realidad y no se a que pertenezco. No se cual es mi verdadero yo. En mas de una ocasion yo me enfrascado en grandes batallas en que mi cuerpo y mente encontraron su maximo limite y siempre mi lado oscuro terminaba por acudir a mi ayuda, socorriendome. Yo detesto llorar monje porque considero las lagrimas, un regalo muy privilegiado de los humanos...
La lluvia disminuyo de presion y el monje con soltura se acerco a Dante y le puso su mano al hombro.
-Hijo mio, todos poseemos un cielo y un infierno dentro de nuestro ser y es indispensable hallar el equilibrio si quieres llegar a ser algo mas que un hombre o un demonio. Sin embargo tambien en nosotros podemos encontrar a nuestro peor enemigo ya que solo tu sabes tus debilidades, tus pensamientos y tus sentimientos. Tu mismo te provocas tu propia herida y la abres conforme tus sentimientos o acciones influyan en ti. Solo alguien puede detener ese lado tuyo...
- ¿Y quien puede ser?- pregunto Dante observando al monje con aprecio.
-Tus amigos-
El monje abandono a Dante bajo la lluvia mientras este sentia como las heridas de su corazon poco a poco iban cicatrizando...

lunes, 8 de abril de 2013

Enfrentado a nuestros demonios


El monje tibetano se encontraba meditando acerca de la corriente espiritual cuando escucho el ruido. Inmediatamente se levanto y dirigió su mirada hacia el bosque, lugar donde provino ese estridente sonido. Un sudor frió le recorrió la nuca hasta la espalda ¿Que seria?
- Bodhisattva, guía mis pasos- murmuro fervorosamente el monje y tomando una espada, no sin cierto temor, se encamino al bosque. Mientras bajaba las escaleras podía sentir la oscura presencia de un ser maligno que acechaba entre los arboles. Cuando sus pies tocaron el suelo, la hierva húmeda y fría le proporciono cierto alivio. El monje se adentro al bosque con cuidado mientras los sonidos de sus pasos resonaban y causaban eco entre las hojas de los arboles. Había un silencio sepulcral, ni los pájaros cantaban a pesar de que el sol ya había salido ni el viento susurraba entre las copas de los arboles.

De repente, el mismo ruido volvió a a sonar y esta vez mas atronador que antes y el monje sintió como los músculos de su cuerpo perdían fuerzas ante el miedo, un temor a lo desconocido. Siguió caminando hasta que se detuvo en frente un matorral. Algo le decía que detrás de ese conjunto de hojas se ocultaba algo empero aun se mantenía suspicaz.
- Ayu...da- un pequeño murmullo se escucho entre las hojas del matorral. Una respiración entrecortada y forzada preocupo al monje y sin importarle su bienestar o seguridad se adentro dentro del matorral. Las espinas hicieron destrozos en su ropa y su piel pero el no le importo, había dejado caer su espada por la preocupación que lo había invadido. Lo que encontró al otro lado fue algo indescriptible. Un gran charco de sangre que abarcaba toda la hierva y dos cuerpos, unos de ellos respiraba y el otro era una masa deforme en que se le podía apreciar dos grandes agujeros. El monje se apresuro hacia el hombre herido y vio que tenia un gran corte desgarrador que adornaba su pecho.
- Calme y trate de no respirar mucho- le aconsejo el monje mientras se rajaba sus vestiduras para vendarle las herida que sangraba copiosamente. El hombre tenia el cabello del color blanco y poseía una mirada profunda y cansada. Cuando el monje comenzó a aplicar el vendaje, el herido  le apretó con fuerza su mano monje lo miro.
- ¿Esta muerto?- pregunto el herido casi sin aliento haciendo referencia al segundo cuerpo que descansaba a su lado. El monje se aventuro a tocar la masa deforme y descubrió con espanto que era un perro de dos cabezas con ojos cubriendo su cuerpo por doquier. Había escuchado rumores acercas de la existencia de demonios que adaptaba formas mundanas y que siempre rondaban por los lugares mas apartados del mundo pero eso era algo muy fuera de lo natural.
- Si esta muerto- le respondió el monje y el herido sonrió antes de desmayarse.
...
El hombre de cabellos blancos  abrió los ojos con debilidad y descubrió que estaba vendado y curado. Hizo un esfuerzo para reincorporarse de la cama y observo a su alrededor. Estaba dentro de un cuarto oscuro y la única iluminación era una pequeña vela. Reviso a su alrededor en buscas de sus pertenencia sin tener mucho éxito.
- Reze toda la noche para que te recuperaras- dijo una voz y el monje se revelo entre las penumbras con una taza de te en la mano. 
- Ten, toma esto- le brindo la bebida caliente al herido- te ayudara a sanar mas rápidos tus heridas. 
El hombre lo miro con recelo pero después tomo la taza y bebió. El monje noto que su paciente poseía un collar con una piedra preciosa de color escarlata.
- Muchas gracias pero mi dolor no es superficial- le dijo el hombre de cabellos blancos
- Eso ya lo note- respondió con calma el monje- ¿Cual es tu nombre?
- Dante- murmuro el herido- ¿Y el suyo?
El monje sonrió y le ayudo a arroparse mas con el manto. Sin duda alguna, Dante no era alguien normal.
- Mis padres me llamaban Wong Shu de  pequeño- repuso el monje- Pero mis actuales compañeros y el mundo entero me conocen como el Dalai Lama .
Dante observo a su cuidador por varios segundos antes de darse cuenta de la importante figura que era en realidad.
-¿ Que es lo que buscas por estos alrededores, joven Dante?- pregunto el Dalai Lama
- Busco poder enfrentar a mis propios demonios, hacerle frente a mis peores miedo y encontrar el motivo por el cual estoy en este mundo. Yo me encontraba recorriendo el mundo por 10 largos años en buscas de esas respuestas sin ningún resultado... ¿Usted me puede ayudar?- dijo esto ultimo en tono de suplica. El monje suspiro y con un soplido apago la tenue luz de la vela.
- Me temo que no puedo ayudarte a encontrar esas respuestas pero te voy a proporcionar los medios para que tu puedas lograr llevar a cabo tu cometido. Hasta ahora descansa que aun no te has recuperado.
El Dalai Lama observo como Dante iba sumiéndose en un profundo sueño. La idea de ayudar a un ser humano a encontrar las respuestas que la misma vida no le ha dado le parecía una labor sagrada que debía
 llevar a cabo

martes, 1 de enero de 2013

Propositos y sueños...



Dedicado a Luris Almanza



-¡Hey Bob!- vocifero John al cantinero mientras terminaba de tomar su ultimo trago de whiskey- ¡Dame otra!
- ¿Y a esta vez a quien se lo vas a dedicar?- le dijo Bob mientras le pasaba un vaso lleno del liquido ambarino. Este lo atrapo con sus dedos apenas termino de tomar del otro.
- ¡A mi ex novia!- exclamo John y se llevo el vaso a la boca.
Dentro de un bar londinense se estaba llevando a cabo una reunión entre colegas y amigos con motivo para recordar los mejores momentos del presente año. Las calles estaban inundadas por miles de miles de almas, que esperaban con ansiedad la venida del nuevo año, la gran mayoría de las personas poseían sueños que esperan realizar, otros estaban ahí por ser el momento perfecto para un beso bajo los fuegos artificiales y algunos hasta con temor de que una tragedia sobreviniera. Pero dentro del bar, el ambiente era mas propicio para un grupo de amigos que quería pasarlo en grande. Algunos jugaban billar mientras otros como John que se ocupaban en brindar por cada aspecto de su vida ya sea bueno o malo. En pocas palabras, un sitio ideal para despedir el año.
 Sin embargo de todos las personas que conformaban esa velada nocturna, estaba una mujer de cabello negro corto, figura esbelta el cual presentaba un conjunto de camisa blanca arremangada hasta los codos, pantalones de cuero y un sombrero "Flechet", de textura francesa. Pero el mayor atractivo de ella eran el color de sus pupilas, rojo en uno y azul en el otro, que le daba un toque muy bohemio a su personalidad. A diferencias de los demás, ella se había contentado con una pinta de cerveza de barril. Ella sonrió al ver por televisión la multitud que se reunía bajo el BIG BEN, en espera de que la manecilla del reloj llegase a las doce.
- Hey Lady- dijo John cuando iba por su décimo trago de whiskey- Esta va por ti.
- Gracias, John- agradeció la mujer.
- Damas y caballeros- anuncio de repente Clark Bird, el compañero de John- Propongo que en estos últimos momentos que nos queda de este año brindemos por cada sueño y propósito que tengamos en mente realizar el próximo año-
¡Yo comienzo! - dijo John borracho mientra levantaba su vaso con mano temblorosa-  Yo brindo por esa hermosa dama que esta sentada junto con nosotros. Los aplausos secundaron su declaracion.
- Yo brindo- declaro otro- Por mis camaradas que se encuentran ahora mismo en Oriente defendiendo el honor de la Reina.


Y así fue pasando. Por la vida, la familia, los amigos y enemigos, el buen vino, Rooger Moore, Freddy Mercury. La lista interminable de deseos y propósitos que aumentaban conforme el vino y la cerveza circulara entre los presentes. La posibilidad  de enmendar los errores del pasado, la oportunidad de comenzar desde cero y escribir un nuevo capítulo dentro de ese libro inmenso llamado Vida era lo más maravilloso que podía una persona a su alcance.

Cuando le llego al turno a Lady de brindar (justamente a escasos treinta minutos antes de las doce), ella se quedó pensativa. Usualmente desde que había perdido a sus padres, las fiestas de fin de año se habían reducido a meras reuniones en bares, discotecas, clubes nocturnos. Claro había excepciones, como la fiesta de fin de año en el "Devil May Cry" en las cuales la tradicional cena de pavo era reemplazada por partidas de póker conformadas por ella misma, el dueño que no ganaba ni una, Patty Lowell, Morrison y Trish. Esas noches, sin duda eran los mejores momentos que pasaba con ellos. Sin embargo, en esa ocasión no era así.

Lady, con una sonrisa, pidio otro vaso de cerveza. Cuando le fue concedido, ella se levanto y exclamo.
- !Brindo por la verdadera familia!-
Una ovacion la apoyo en su desicion y ella pudo ver, por la TV, que ya era Año Nuevo. Los mismos fuegos artificiales fueron los que anunciaron la llegada del nuevo año

Hoy es la primera página en blanco de un libro de 365 páginas, así que escribe una buena historia.
Lady sonrio

domingo, 23 de diciembre de 2012

Una blanca navidad...

Dedicado a Karen (gracias por haberte conocido)


Finalmente llego la época navideña, el tiempo en que todas las personas compartían con sus familiares, amigos y hasta extraños. Las calles se encontraban en un tranque perpetuo, los consumidores abarrotaban los centros comerciales en busca del regalo perfecto y a toda hora se escuchaban villancicos. En Londres, el caos por la aproximación de Nochebuena era de niveles abrumadores pero dentro de esa multitud alocada se encontraba una persona muy peculiar.

Paseando por las calles de Londres, cuando los fuegos artificiales estaban en su auge, una mujer rubia hermosa apreciaba el festival de colores con cierta indiferencia mientras fumaba un cigarrillo. Ante sus ojos se extendía todo un espectáculo de luces pero en ella no despertaba el intereses suficiente. La Nochebuena antes para ella significaba algo mas, cuando ella al fin tuvo una familia. La rubia siguió caminando, haciendo caso omiso a los fuegos artificiales, mientras dejaba sus pisadas en la nieve. Irónicamente el día mas alegre y festivo del año, ella se sentía sola. El único ser que una vez llego a apreciar y a amar había desaparecido desde hace 10 años, sin dejar rastro alguno, y esta era su décima navidad sin aquel adicto a las pizzas.
- Rayos- murmuro la rubia cuando recordó el nombre de aquella persona, un nombre bastante original. Camino hasta un parque abandonado donde los columpios eran balanceados por el frió viento, no había absolutamente nadie y por un momento pensó en irse pero lo recapacito. No tenia a donde pasar la Navidad así que parecía que el tobogán era una buena opción como cama. Se sentó en un columpio y comenzó a mecerse.   Eso la recordaba a su primera navidad con su amigo desaparecido, cuando en vez del tradicional pavo optaron por mandar a pedir cinco pizza familiares combinación, y para cuando el motorizado había llegado el reloj ya había marcado las doce por lo que la cena de Navidad lo conformaron ella, su amigo y el repartidor de pizzas. Fue su primera Navidad y la que siempre le gusto.
El resto de las navidades no fueron de la misma calidad...
Lady en ese mismo instante debía estar devorando una suculenta cena de Navidad junto con la joven Patty Lowell y el detective Morrison y el apuesto y terco Nero pasando la Nochebuena con su esposa Kirie en Fortuna...
Por las mejillas de la rubia se deslizaron las lagrimas de un recuerdo que había enterrado en su memoria y que ahora las circunstancias lo obligaron a desempolvar.  Ella mismo se consideraba una chica dura, que no se permitía el lujo de mostrar sus sentimientos. pero ciertamente la única persona que la hizo sentir ya no estaba con el. Dejo de mecerse para aspirar del aire cuando detecto la presencia de alguien detrás del tobogán. Instintivamente llevo su mano hasta las pistolas "Luce" y "Sombra" pero se detuvo a tiempo cuando vio salir, detrás del tobogán, a una niña que vestía pobremente. La rubia respiro con alivio.
- ¡Dios, casi te meto un tiro!- la reprocho mientras le quitaba la suciedad de la cara- ¿Donde están tus padres?
- Yo no tengo papas- musito la niña y tosió. La rubia, alarmada, se quito su abrigo y se lo puso. Curiosamente el abrigo abarcaba todo su cuerpo solo quedando su cabeza expuesta al frió y  la rubia se cubrió con su propio gorro.
-Bueno, supongo que estamos en las mismas circunstancias- dijo la rubia con una sonrisa- ¿Como te llamas?
- Rachel- le respondió la niña un poco mas animada.
- Mi nombre es Trish- se presento la rubia y Rachel sonrió. Ambas se sentaron en el columpio mientras observan los fuegos artificiales. Por alguna razón Trish ya no se sentía tan mal.
- ¿Por que llorabas- dijo Rachel después de un rato de silencio. La pregunta pillo desprevenida a Trish
- Recordaba a un amigo especial-
- ¿Y donde esta ahora?- le pregunto Rachel y Trish la observo. Los ojos enormes de la niña la conmovió.
- No se pero el una vez me dijo que llorar era un privilegio que los humanos solo podía poseer- dijo Trish mirándola-  Sin embargo hay días que no puedo retener mas las lagrimas y me dejo llevar por el sentimiento.-
Después de que ella hablo sintió como la mano fría de Rachel se poso en la suya. La miro y se sorprendió por verla sonreír.
- Mis papas antes de morir me dijeron que llorar era un don maravilloso en el cual podíamos desahogar todas nuestras preocupaciones y frustraciones en las lagrimas. Para mi las lagrimas son las muestra de nuestra humanidad y no me avergüenzo de decirlo-
Trish la observo con ternura y le apretó con cariño la mano.
- ¡Mira!- exclamo emocionada Rachel y Trish miro como un gran fuego artificial de color rojo ilumino todo el firmamento. A lo lejos el reloj marco las doce dando inicio a una serie de campanadas y anunciando el nacimiento de Cristo. Rachel abrazo a Trish y esta sorprendida dejo que una lagrima corriera por su mejilla.
"Feliz Navidad, Dante"

                                                                              ...

lunes, 17 de diciembre de 2012

La Descubrimiento de Nuestro Ser

56 años antes de los acontecimientos de Vie de Marli

¡Vamos Dante, se que puede esforzarte mas!
¡ Cállate y pelea!
Dos muchachos se enfrascaban en una batalla de espadas de madera en medio de un campo de trigo. El sol de atardecer acariciaba con su calor el paisaje que rodeaba esos alrededores. Unos de los muchachos, alto, de buen porte y de mirada segura, le llevaba una enorme ventaja a su oponente el cual dudaba a la hora de atacar y presentaba todo lo contrario a pesar de que eran gemelos.
- Dante, si quieres salir con la chica mas guapa de toda la secundaria sera mejor que me superes- dijo Vergil de manera burlona- O si no me adelantare primero que tu-
- ¡Ni hablar!- exclamo Dante fuera de si y arremetió contra su hermano de forma brusca pero Vergil, de manera elegante, esquivo la espada de madera, lo desarmo y lo arrojo al piso. Dante intento recuperar su espada entre la hierva de trigo no obstante Vergil la pateo lejos y le puso la espada en el cuello.
- No te cansas de ser siempre el segundón hermanito- repuso Vergil bostezando. El rival vencido al darse cuenta de su derrota hizo un enorme esfuerzo para evitar derramar las lagrimas, hecho que Vergil no paso desapercibido. El sol ayudaba a ocultar las pequeñas lagrimas de su rostro gracias a la sombra.
- ¿Pero de que estas hablando hermano?- dijo Dante con voz quebrada- Sabes que algún día te venceré.

Los dos hermanos se observaron el uno al otro antes de que el llamado de una mujer los volviera en si. Ambos tenían objetivos diferentes en la vida sin embargo sabían que sus caminos estaban destinados a cruzarse una y otra vez. El primero en llegar a la casa fue Dante, donde corrió a los brazos de una hermosa mujer rubia. Era la madre de los gemelos, Eva. La mama se percato en los moretones en el brazo de su hijo y se indigno.
- ¿Otra vez estaba jugando con eso palos peligrosos, hijo mio?- replico Eva con tono preocupado- ¿Cuantas veces tengo que decirte que no quiero que te involucres en ese tipo de juegos?-
- Mama, no creo que sea para tanto- dijo Dante un tanto abochornado. Odiaba cuando su mama lo atendía con mucho cariño. Lo desconcertaba y le incomodaba.- Vergil y yo solo practicábamos un poco.
- Madre no creo que eso deba preocuparte tanto- añadió Vergil al alcanzarlos. Con una enorme sonrisa palmeo la espalda de su hermano- No le caería mal a mi hermanito aprender como defenderse en la vida.
Eva miro con reprobación a su hijo. En un arranque de emociones, Dante corrió dentro de la casa, subió las escaleras y se encerró en su habitación dando un portazo. No soportaba que Vergil siempre lo estuviera superando en todo. En la escuela era uno de los mas populares e inteligentes y fácilmente no había tenido problemas con tener mas de una novia en la secundaria al contrario de el que siempre ha vivido bajo la sombra de su hermano mayor, era rechazado constantemente por las chicas y aunque su dedicación a la escuela no era la misma que la de su hermano, era sumamente inteligente.
 "¿Pero de que vale?"
Sintió que alguien toco la puerta pero lo ignoro. No estaba de humor para que su mama lo estuviera sermoneando. La puerta volvió a tocar con mas fuerza y esta vez Dante la abrió. Era su mama.
-¿Puedo pasar a charlar contigo?- pregunto con semblante preocupado. Dante asintió lentamente. Eva entro al cuarto y se sorprendió al encontrarlo limpio y ordenado (Dante no era lo que decían una persona pulcra), encendió la luz de su recamara y se sentó en la cama junto a su hijo. Estaba terriblemente preocupada por la relación de sus dos hijos, a pesar de que ambos llevaban 14 años conviviendo juntos aun no habían podido crear un lazo de hermandad gracias a las constantes disputas entre los dos.
- Extraño a mi papa- murmuro Dante
- Yo también lo extraño hijo mio- le dijo Eva mientras le acariciaba su cabello blanco, una de los tanto rasgos que había heredado de su progenitor- Créeme que no pasa un día en que no añore su presencia en esta familia.
- ¿Entonces por que se fue y nos abandono?- replico Dante y gruesas lagrimas se dezlisaron por su rostro- Todos los dias trato de ser como papa, quiero ser como papa.

Eva abrazo su hijo con fuerza, sabia que su hijo sufria por ser objeto de la sociedad.
- ¿Mama una pregunta?- murmuro Dante con voz quebrada- ¿Tu crees que algun dia encuentre mi destino, la razon por la cual estoy en este mundo?
- Hijo, todos nacemos con un proposito- dijo Eva- Poseemos tanto virtudes como defectos pero la clave para que tu sobresalgas por encima de tus propias expectativas es que debes aprender a convertir tu dolor y asimilarlo. Usar tu defectos y convertirlos en tus ventajas. Creeme que no me tendras para toda la vida pero lo que mas deseo en este moento es que tu y tu hermano dejen de competir y se concentre mas en ser hermanos. La razon por la cual tu padre nos abandono sigue siendo un misterio sin embargo debes aprender a mirar dentro de ti y buscar ese yo que te define. No trates de ser como tu papa, tratar de ser tu mismo y encontraras tu motivacion

Dante observo a su madre y la abrazo. Sabia que aun le quedaba un camino largo por recorrer, el mundo era grande. Y el tenia que sobresalir, tenia que triunfar, tenia que ascender.


sábado, 8 de diciembre de 2012

La Leyenda de un Caballero Oscuro...


Vie de Marli es una ciudad en su máximo esplendor, los cielos transmitían un azul inigualable y el aire que se respiraba purificaba los pulmones. Fundada en el siglo XV y ubicado en algún rincón de Francia, la ciudad fue objeto de millones de batallas encarnizadas entre los soldados y los demonios por la posesión de unos poderosos artefactos que eran las llaves para revelar Las Puertas del Infierno: Las Arcanas. Los humanos iban cediendo terreno al enemigo mediante iban pasando los años hasta que un día un hombre desconocido se presentó al pueblo y cambio por completo la guerra. Gracias al poder que tenía este personaje, los pobladores de Vie de Marli recobraron la fe y el valor y comenzaron a vencer a los demonios. Al final los humanos vencieron y lograron quedarse con las Arcanas. Su misterioso benefactor había cumplido con su misión sin embargo el guardaba un oscuro secreto, algo que podría dar un giro completo a la paz que reinaba en Vie de Marli. El mismo era un demonio, había sido desterrado por sus iguales por defender a los mortales pero la verdad oculta es que ese gran demonio, que gozaba de un trato especial en el Inframundo, había caído sumiso ante el sentimiento más poderoso pero a la vez peligroso que podría sufrir cualquier criatura: El Amor.
Él lo rechazo todo. Poder, Prestigio, Inmortalidad solo para dedicar su vida a proteger a los humanos y decidió dejarlo todos atrás. Ahora en el actual siglo, después de sacrificar su inmortalidad para sella por siempre el puente entre el mundo humano y el Infierno, este caballero se casó con una mortal llamada Eva y vivió una de las épocas más felices de su vida e inclusive olvido su pasado como demonio y le había abierto las puertas a una nueva vida. Su mayor felicidad fue los dos gemelos que tuvo con su mujer y ambos les regalos sus dos más grandes posesiones: La espada Rebelión para el hijo rebelde y la katana Yamato para el hijo disciplinado.
Sin embargo el mal volvió a invadir Vie de Marli y este caballero, sin poder ignorar los golpes de su conciencia, volvió a retomar las armas y abandono su familia para defender el pueblo que lo había aceptado. El nuevo enemigo era Argosax, un poderoso ente demoniaco que obligo al caballero oscuro usar todo su poder pero aun así no pudo evitar perder todo su poder en manos del temible demonio. Como última solución, el caballero decidió sacrificarse cerrando la Puerta del Infierno desde adentro y quedo atrapado en el Infierno donde retomo su batalla con Argosax y pelearon.
Nunca se supo el paradero del caballero oscuro, muchos decían que había muerto en batalla, otros especulaban que había vencido sin embargo su más grande legado permaneció junto con sus dos hijos. El nombre del caballero oscuro fue el título de muchos escritos, pergaminos y libros y tras su desaparición surgió su leyenda…
La leyenda del Caballero Oscuro Sparda…
Años más tarde la mujer del caballero oscuro murió salvando al  hijo rebelde…
El hijo disciplinado término corrompido por el Rey del Infierno y muerto por su propio hermano…
Ahora Vie de Marli está bajo la jurisdicción de un empresario que esconde un poder oscuro y tiene en mente hacerse con las Arcanas. Esta vez no hay un caballero oscuro que pueda hacer frente este mal, un mal que no solo afectara la ciudad sino Europa completa y el único legado que dejo Sparda para la protección de Vie de Marli se encuentra desaparecido.
El hijo rebelde…

lunes, 3 de diciembre de 2012

Una pequeña reunion...


La oscuridad reinaba en el callejón, las sombras jugaban y se escondía mientras eran victimas de estar atadas a los objetos terrenales. Un hombre fumaba un puro, se le notaba cansado y avejentado. Las luces de las farolas estaban dañadas en su mayoría y no iluminaba bien lo entornos. El hombre se alejo de las sombras y la luz revelo un persona extremadamente delgada pero con una altura notable. Sus cabellos eran negros al igual que todo el conjunto que vestía sin embargo un extraño y negro aura lo rodeaba. El hombre sonrió.
- Vaya bullicio- repuso para si y luego miro el reloj en su muñeca- Ya casi es hora, sera mejor que camine-
Tiro el puro hacia el suelo húmedo y lo piso. Tenia un compromiso que atender, los negocios requerían su presencia mas si el comprador tenia el bolsillo lleno de billetes. Camino por varias avenidas notando la podredumbre de las calles, los ladrones y maleantes haciendo de la suya, algunas prostitutas esperando en una esquina si algún desdichado llegase necesitados del falso amor que ellas ofrecían. En cierto modo la ciudad había alcanzo un progreso leve con relación al bajo mundo,la droga corría a todos lados y gente implicada en el asunto amanecía colgados de un puente o en el peor de los casos sus cuerpos envueltos en sabanas y tirados al bosque. Nadie indagaba ni se preocupaban por hacerlo. La mafia demoníaca tenia comprada todo el area y muy pronto la ciudad. Pero dichos aspectos no eran de interes para el hombre que caminaba hacia un bar oscuro ubicado en la esquina. El era un mercenario a sueldo a finales de cuentas.
_¡Que bonito lugar de reunion!- exclamo con sorna al ver que el punto de encuentro era un bar en estado lamentable. Entro si preguntar y encontro, con sorprersa que el lugar estaba decorado y totalmente limpio. Al fondo tres personas lo esperaban.

El mercenario sonrio al darse cuenta que su comprador era un hombre muy poderoso en el area. Sentado en un sillon de cuero y vestido con una elegante camisa blanca, pantalones del mismo color, el cabello peinado hacia atras y con porte de caballero: era Arius. Sus dos guardaespaldas al ver al mercenario entrar, defundaron sus dagas pero Arius con un gesto las detuvo.
- ¿Que pasa Malkovich?- dijo Arius con una sonrisa-  Pareces sorprendido de verme en el lugar mas apartado de la ciudad-
- En realidad, a estas alturas ya nada me sorprende- repuso Malkovich y saco otro puro de su bolsillo- Tus guardaespaldas no parecen contento de verme aunque debo alabar tu buen gusto.
- Jajaja ni que lo digas pero debes sentirte seguro. Ellas solo obedecen mis ordenes y aunque al principio ellas se muestren reacias a mi voluntad tarde o temprano caeran sumisas. A finales de cuenta el poder lo es todo.
- Y bueno ¿Que pequeño encargo tienes para mi esta vez?- dijo Malkovich con intencion de cambiar el tema.-  Espero que sea mas interesante que supervisar el trafico de tus cargamentos  de droga. Lidiar con los demonios del bajo mundo no es facil.
-Descuida, esta vez sera algo mas directo- menciono Arius y saco de su bolsillo una foto y se la entrego a Malkovich. Este la observo con detenimiento. Era la foto de una hermosa mujer pelirroja de piel morena.
- Necesito que la traigas a donde mi- dijo Arius- Y con vida. Ya conozco de antemano tu aficion a matar indiscriminadamente.

Malkovich miro con detenimiento a la chica. Ella poseia un collar que le resultaba familiar. Sin embargo se guardo la foto en el bolsillo.
- Veo que por fin vas detras de las Arcanas, Arius- comento Malkovich- ¿Por que la tardanza?
- La hora ya ha llegado y Argosax una vez mas debe resurgir- dijo Arius mientras tomaba una copa de vino.
- Tengo entendido que Argosax fue vencido por el Legendario Caballero Oscuro, Sparda...
- Las leyendas nunca son ciertas, Malkovich- repuso Arius con tono irritado- Tu mas que nadie lo deberias saber.

Malkovich asintio y se dirigio a la salida. No era su obligacion indagar acerca de los propositos de su cliente pero le daba mal espina dicha foto. Su objetivo no tenia la pinta de ser una total imbecil. A finales de cuenta, la ciudad de Vie de Marli estaba llena de sorpresas.
- Otra cosa mas Malkovich- dijo Arius- Asegurate que sea lo mas discreto posible-
Este asintio y salio del bar. Una vez mas el mal olor de la calle le impacto su nariz.
-Coño- musito entre dientes. Ya se acercaba la hora final.